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Almuñécar contra la corrupción

La farsa de Benavides

La farsa de Benavides

IU exije que los gobernantes consulten al pueblo por todo lo que nos afecta. Sin embargo la consulta sobre el PGOU es una burla: ese documento ya no existe.

Benavides pretende ir de demócrata cuando:

  • Benavides y el PP acuerdan subir un 5,3% los impuestos: para eso no hay referéndum.
  • Benavides pone zona azul en todo el pueblo: para eso no hay referéndum.
  • Benavides y el PP pusieron la tasa de basura y cobraron a los ciudadanos dos millones de euros por encima del coste real del servicio: para eso no hicieron referéndum.

Benavides engaña mezclando el PGOU con la crisis. Dice que la construcción está parada porque no hay PGOU, pero eso es mentira. Según sus propias palabras, hay suelo para construir más de 6.000 viviendas. Si no se construye es porque no hay quien compre.

Benavides miente cuando dice que no se hacen hoteles porque no hay PGOU. Ahora mismo hay varios proyectos parados porque los promotores no quieren invertir. Uno es el Hotel Fuerte de La Herradura, que tiene todos los permisos y, sin embargo, no hay dinero o voluntad de hacerlo.

Benavides miente cuando habla del golf como solución a la crisis. Los pueblos que tienen golf sufren la crisis igual que los demás o incluso peor, como es el caso de Marbella, donde el paro sube a un ritmo muy superior al de otros municipios sin campos de golf.

Benavides miente cuando culpa a todos los partidos y administraciones de que el PGOU esté paralizado. Cuando él ganó las elecciones en 2003, PSOE y PP acababan de aprobar un PGOU que habría estado definitivamente aprobado en 2004 si Benavides no hubiera convencido al PP para echarlo atrás. En ese PGOU iban dos campos de golf.  Desde entonces, ha estado perdiendo el tiempo con propuestas inviables. En estos años,  los pueblos de alrededor, con alcaldes de todos los partidos, han ido aprobando su PGOU.

Benavides abusa de los ciudadanos cuando, en plena crisis, decide gastar en propaganda una cantidad que se niega a revelar y que nosotros calculamos en 200.000€. Ni es decente hacer este gasto con lo que está cayendo ni es ético negar a los ciudadanos el coste de esta exagerada campaña. No hay dinero para dar a las asociaciones la subvención del año pasado ni para pagar a las pequeñas empresas, pero sí hay para este derroche de propaganda.

Almuñécar tendrá un nuevo PGOU, que se aprobará respetando la ley. Y ese PGOU no tendrá nada que ver con el documento que se va a votar el día 28, que es del año 2005, y que ya ha sido cambiado por el Pleno en su aprobación provisional el año 2007. El PGOU que Benavides está negociando con la Junta desde hace dos años ya no es el que sale en la propaganda y no lleva ni campos de golf ni marina seca ni otras ocurrencias de Benavides.

NO te engañes. Votar sí no es votar un PGOU ni un modelo de ciudad ni una salida a la crisis. Cada voto a favor de un PGOU que no existe es un apoyo a Benavides, a su política de derroche y a su torpe estrategia de enfrentamiento que nos hace ocupar un día sí y otro también las portadas de los periódicos, y siempre por temas judiciales y escándalos que en nada nos benefician.

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