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IU pide a Benavides y Medio Ambiente que dejen de echar tierra en las playas porque matan la vida

IU pide a Benavides y Medio Ambiente que dejen de echar tierra en las playas porque matan la vida

IU pide públicamente al alcalde y a la Junta de Andalucía que dejen de echar tierra en las playas del municipio porque esa no es forma de regenerar las arenas que se lleva el mar.

La tierra que se ha sacado estas semanas atrás de los cauces de Río Verde y Río Seco hace que muera la vida de tal manera que el perjuicio causado al ecosistema marino es muy superior al supuesto beneficio que tendrá la regeneración de la playa.

IU ya presentó esta denuncia en el último Pleno criticando tanto la forma en que se estaba sacando la tierra del río como la decisión de echarla en las playas.

Al sacar la tierra del río de forma masiva excavando en los mismos cimientos de los muros se ha dado lugar a que estos muros se vengan abajo por varias partes.

Si eso ya es un problema serio que afecta al cauce del río y a los propietarios de tierras colindantes, el vertido de grandes montañas de arena en la playa crea graves problemas ecológicos que son bien conocidos por los biólogos y la gente que se preocupa por los problemas del medio ambiente.

Cuando el mar lava ese material procedente de los ríos, los materiales pesados (arenas, piedras, etc.) quedan en las playas, y los materiales mas ligeros, es decir, los limos, quedan flotando en el mar, dándole un aspecto de turbiedad. Con el tiempo, este limo se deposita en los fondos marinos, creando una fina película sobre las algas que les impide respirar y mueren Al morir las algas, también mueren miles de animales que se alimentan de ellas. Estos limos depositados en los fondos marinos se mueven con las corrientes y continúan haciendo su mortífera labor mucho tiempo después.

La conducta del alcalde y del Delegado de Medio Ambiente de la Junta, al solicitar y autorizar el depósito de estas tierras en las playas, provoca de manera directa  un grave daño al medio marino. Se puede decir, sin temor a equivocarse, que tanto el alcalde como el Delegado de Medio Ambiente de Granada matan la vida al ordenar estas intervenciones en las playas.

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