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IU ve "con normalidad democrática la consulta a los ciudadanos vascos", pero reclama que incluya "una condena expresa a ETA y el compromiso de que el ejercicio del derecho a decidir sólo se pueda hacer en ausencia de violencia"

IU ve "con normalidad democrática la consulta a los ciudadanos vascos", pero reclama que incluya "una condena expresa a ETA y el compromiso de que el ejercicio del derecho a decidir sólo se pueda hacer en ausencia de violencia"

El coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, lamenta en nombre de esta organización "el desencuentro que provocan entre los ciudadanos vascos, en lugar de concitar una mayor unidad en la lucha unitaria contra la violencia terrorista, las distintas propuestas políticas planteadas en los últimos días desde distintas formaciones e instituciones políticas democráticas vascas".

En este sentido, el máximo responsable de esta formación explica que "desde Izquierda Unida vemos con normalidad democrática la consulta no vinculante que el lehendakari pretende hacer a los ciudadanos. Sin embargo, esta normalidad con la que se debería discutir y llegar a conclusiones en el desarrollo de cualquier propuesta política queda indudablemente condicionada por el momento actual en el que los terroristas de ETA vuelven a querer imponer sus planteamientos por la fuerza de los asesinatos y las bombas. Y eso no puede eludirse y debe ser tenido muy en cuenta".

"Por ello -añade Llamazares-, planteamos que la propuesta de consulta hecha por Juan José Ibarretxe no debe obviar esta situación actual, que se traslada tanto a la vida en Euskadi como a la del conjunto del Estado, y debe incorporar dos cuestiones importantes:

1. La condena expresa y directa al terrorismo de ETA. Esta será la mejor manera de que EHAK deba pronunciarse sobre esta cuestión y que no reciba en este debate un protagonismo democrático del que carece. Es la mjor manera de que EHAK no manche un debate que debe ser claro y democrático.

2. Como IU ha reiterado desde hace años, debe haber un compromiso explícito y nítido de que cualquier ejercicio para el derecho a decidir se realizará en completa ausencia de violencia, es decir, sin que haya la más mínima amenaza ni condicionante de la organización terrorista ETA, y previo acuerdo entre las instituciones democráticas y gobiernos de Euskadi y España".

Para Gaspar Llamazares, "sólo así se podrán sentar las bases para el fin definitivo de la violencia terrorista y para la normalización y el entendimiento de la sociedad vasca y de las fuerzas políticas democráticas que la representan"

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