Malaya (o cómo hacer buenos negocios, ligarse a una cantante maciza y además conseguir que la gente te vote)

Seguimos recibiendo noticias de Marbella. Ahora ha salido a la luz, como parte del sumario, un nuevo negocio del alcalde con Roca y sus socios (Germán Hoffman, Pedro Román y el comisario de policía San Agapito). Que no eran tontos, ya es de todos conocido.

La operación es así de simple.

1. El 9 de octubre de 2.001, una sociedad suiza, que es de ellos, compra una empresa llamada Yambali. Pagan por esa compra 4 millones de dólares.

2. La empresa que han comprado, Yambali, tiene un terrenito en Puerto Banús. En ese terrenito se permite, según el PGOU, construir 532 m².

3. El 16 de octubre, Julián Muñoz, el alcalde, firma un convenio urbanístico con uno de ellos, en este caso el tal Hoffman. Gracias a ese convenio, ahora ya se podrán construir en el terrenito 11.416 m².

4. Según la ley, al producirse un incremento tan enorme de la edificabilidad, el dueño del terrenito tendría que cederle al ayuntamiento 5.442 m².

5. Pero en el convenio dice que le van a dar al ayuntamiento sólo 2.400 m². Los técnicos calculan que sólo por ese tema, el ayuntamiento (es decir, los ciudadanos de ese pueblo) pierde 5 millones de €.

6. Un año después, el 9 de agosto de 2002 (nosotros no nos enteramos porque estábamos en la caseta de las fiestas), esa empresa ya ha cambiado de nombre. Ahora no se llama Yambali sino Lispag. Ávila Rojas compra esa empresa con su terrenito incluido. Y paga por ella 11,5 millones de euros. Ya puede construir 114 pisos y un puñado de garajes en mitad de Puerto Banús. (Que, por cierto, es lo que nos falta aquí para ser felices, un puerto como ese)

7. Y ahora ya nos falta saber el beneficio que ha obtenido Pepe, es decir, Ávila Rojas en la operación. Pero para eso tendríamos que saber a cuánto ha vendido los pisos, y ese dato no lo sabemos aún. En cuanto lo sepamos, les informaremos.

8. Tampoco sabemos cómo se han repartido el dinero el alcalde, el técnico de urbanismo, el promotor, el comisario de policía y el testaferro.

9. Pero sí sabemos que los que saben hacer esos negocios saben hacer magníficas campañas electorales. Tan buenas que ganan por goleada a los torpes de IU que sólo saben pegar carteles cutres. Esta gente son listos, tienen televisiones a su servicio, tienen señores con buenos trajes que salen en sus teles hablando del magnífico progreso y de lo negativos y torpes que son los de izquierdas, que no quieren más que paro y miseria.

10. Y también sabemos que, aunque tarde, muchos acaban en chirona.