Llamazares valora que el Gobierno muestra un compromiso a cuentagotas para recuperar la economía con sus medidas insuficientes de intervención pública
Gaspar Llamazares reclama una apuesta decidida del Gobierno socialista “por la intervención pública en el sector productivo y en el capital de las grandes empresas cuando sea necesario”, en su valoración sobre el Real Decreto con las últimas medidas económicas –el octavo paquete de ‘recetas’ en los último tres meses, tras más de medio año de negar la crisis- aprobado hoy por el Consejo de Ministros.
Para Llamazares, estas medidas suponen “una aportación insuficiente” para la economía, ya que “aunque se ha abierto una puerta a la participación pública en las empresas, lo que desde IU reclamamos en solitario desde siempre, ésta sigue sin llegar a lo debido y la puerta no se ha abierto lo necesario”. Opinó que este compromiso público no debe hacerse “por fascículos o a plazos. Así no se logrará reactivar la economía”.
“Estamos –aseguró- ante un compromiso a cuentagotas. Este último paquete de propuestas no basta para calentar la economía española”. Entre los motivos planteados por Llamazares está el que “nos da la impresión de que el Gobierno sigue centrado en los aspectos tradicionales de nuestra economía, es decir, en las infraestructuras”, dejando de lado otros como la industria y, lo que es más importante, “el estímulo necesario para un cambio de modelo social y productivo. Todo esto no se puede hacer con cuentagotas y sin incrementar sustancialmente la partida de gasto social, que sigue siendo muy precaria”.
Además, coincidiendo con la confirmación de las últimas cifras sobre la drástica reducción del empleo y la publicación del dato adelantado de inflación –que en el mes de noviembre se habría reducido hasta el 2,4%, principalmente por el descenso de los carburantes-, el portavoz parlamentario de IU aseguró que la economía España “está en peligro de congelación. La bajada supone un alivio, sobre todo para los trabajadores con menos ingresos, pero es muy preocupante que el descenso tan brusco se haga con pérdida de empleo y esté vinculado al deterioro grave del consumo”.
Llamazares incidió en la necesidad de que el Estado tome una participación pública en empresas estratégicas como Repsol, lo que no significa “apuntalar a Sacyr” sino “reforzar la participación del sector público en esos sectores”.
Respecto a la comisión de investigación solicitada por el PP sobre la posible entrada de la compañía rusa Lukoil en el capital de la española Repsol a través de la compra de acciones de Sacyr, Llamazares señaló que “ya se sabe quienes son y que tiene una mayoría de carácter estatal ruso por mucho que se diga que es una empresa privada”.
Opinó que “Lukoil no debe entrar en Repsol”, pero tampoco ninguna otra empresa aunque sea comunitaria ya que “lo que nos preocupa es que se pierda el control de una empresa estratégica. Apuntalar a Repsol a través de participaciones privadas -como la de Sacyr- es pan para hoy y hambre para mañana”.
A su juicio, tanto el PP como el PSOE son responsables de la privatización de Repsol y, por eso, “tienen muy difícil dar una alternativa porque sería negar lo que han hecho en el pasado reciente”.
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