Costa Digital. 26 de febrero del 2009
La recta final de la campaña al referéndum parece una carrera a la busca del “sí o la abstención. El “no” parece no estar entre las expectativas, aunque sí sea una opción entre los que se alegran del fallo de la justicia al favor del referéndum, pero no comparten ni las maneras de celebrarlo ni la de exponerlo. “Voto porque considero que es un derecho democrático, aunque no estoy de acuerdo con el modo de exponerlo”. Dice un vecino que se declara socialista y que tampoco está de acuerdo con la posición de su partido en abstenerse: “Me parece que estamos en una democracia y nuestro deber es participar; por tanto no entiende que haya partidos políticos que prediquen la abstención”
Entre lo que se declaran abiertamente a favor del “sí” está la recientemente creada Plataforma de Empresarios y Trabajadores que en un comunicado a los medios de comunicación apoyan a Convergencia Andaluza y Partido Popular en sus posiciones abiertamente afirmativas en el referéndum.
Para la Plataforma “no se trata de discutir de política, ahora lo que hay que hacer es política social acudiendo a votar el sábado para defender y ejercer nuestro derecho a decidir por nosotros mismos”.
Ellos si están convencidos que el resultado afirmativo del referéndum “puede dar el empujón definitivo para que haya cuanto antes un nuevo Plan General de Ordenación Urbana que permita dar trabajo rápidamente y evite que se produzcan sentencias con ocho años de retraso”.
Pero los hay escépticos y hasta críticos con dicha plataforma que creen oportunista lo que consideran un alarde de apoyo a Benavides: “Son los mismos de siempre”, dice Miguel, un trabajador en paro desde hace siete meses del barrio de San Sebastián: “prometen que si votamos sí al día siguiente esto se llenará de grúas, pero ellos saben que la crisis es para todos y que la construcción va a estar parada mucho tiempo”.
Lo que sea tendrá su respuesta el próximo sábado, mientras los datos de nuestra encuesta, en CostaDigital.es, dejan muy empatados los resultados, aunque, según la misma, el “no” parece ser una opción menos minoritaria de lo que se pensaba.
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