Izquierda Unida exige a Rajoy que ponga orden de verdad en el PP y se deje de actitudes hipócritas y doble moral sobre la relación de Matas con delitos de corrupción

El miembro de la dirección federal de Izquierda Unida Eberhard Grosske ha exigido hoy al líder del partido Popular, Mariano Rajoy, que “ponga orden de verdad en su formación y deje de profundizar en actitudes hipócritas y en casos de doble moral”. El dirigente balear de IU hace esta valoración en relación a las medidas que la dirección nacional del PP ha dicho que podría tomar con el ex presidente del Govern Balear, ex presidente del PP en esta comunidad hasta 2007 y ex compañero de gobierno de Rajoy en el gabinete de José María Aznar, Jaume Matas.
 
Tal como ha anunciado, la dirección popular se habría planteado hasta llegar a su expulsión del partido en el caso de que el juez dicte contra Matas medidas cautelares de avanzar en las imputaciones por, entre otros delitos, presunto enriquecimiento ilícito y financiación irregular del PP por los que se le investiga en el ‘caso Palma Arena’ y que le han llevado a ser citado a declarar ante los tribunales.
 
Para Grosske, “la regeneración política de la que gusta alardear a Rajoy no pasa por lancear ‘muertos políticos’ de cara a la galería, ni por tratar de dar carpetazo a la actual situación política de su partido en Baleares, haciendo creer que se rompe con el pasado utilizando el último congreso ‘popular’ para poner a un dirigente semidesconocido al frente del partido. Eso es continuar como siempre”.

El dirigente federal de Izquierda Unida advierte a Rajoy de que “las dobles varas de medir no sólo son moralmente indefendibles sino que forman parte del problema de la corrupción política en general y de su partido, en particular”.
 
Eberhard Grosske señala que “gestos de cara a la galería sin entrar al fondo del problema me recuerdan mucho al empleado por Aznar en 1995, cuando hizo dimitir al entonces presidente balear Gabriel Cañellas para que ‘no fuera un obstáculo en mi camino hacia La Moncloa. ¿Sabe señor Rajoy qué pasó tras la salida de Cañellas?... pues que entró Jaume Matas”.
 
Grosske cuestiona las intenciones de la dirección nacional del PP de actuar realmente contra sus numerosos imputados por múltiples casos de presunta corrupción en las Islas y lo ilustra con un ejemplo palmario. “Sin duda –señala- Mariano Rajoy conoce que Rafael Durán, quien fuera presidente del consorcio del velódromo Palma Arena, compatibilizó durante muchos meses su puesto de concejal en el Ayuntamiento de Palma con su situación de libertad bajo fianza, hasta que recientemente abandonó la corporación municipal a iniciativa propia y sólo ‘para facilitar una moción de censura’, según dijo”.
 
“Durán –recuerda Eberhard Grosske- no sólo sigue estando a día de hoy en libertad bajo fianza y siendo militante del PP sino que su partido le honró hace poco con formar parte de la Mesa del Congreso ‘popular’ de Baleares. Difícilmente se puede hacer pasar este cónclave, ni en Palma ni en la calle Génova, como un congreso de la renovación y la ruptura con el pasado con estas actuaciones y estos antecedentes”.