Despidos baratos sin derecho a pataleo

Los ceses procedentes con 20 días de indemnización limitan la posibilidad de acudir ante el juez

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Nueve días después de que entrara en vigor la reforma laboral, Manuel Botella, de 46 años, comenzó su jornada a las nueve de la mañana, como un día cualquiera, en el hotel Elba de Motril. Lo que no se esperaba, tras nueve años como jefe de sala, es que antes de las doce del mediodía le iban a mandar a casa. Y no de vacaciones precisamente, como le ha dicho a su hija de nueve años para que no se preocupe. El hotel ha prescindido de Manuel, de José Antonio García González, jefe de compras durante diez años en el mismo establecimiento, y de otros cinco compañeros más.

Todos a la calle vía despido procedente. Son algunas de las primeras víctimas granadinas de la nueva reforma laboral, que permite justificar el despido objetivo con 20 días de indemnización por año trabajado (con un máximo de 12 mensualidades) si la empresa encadena una caída de ingresos durante tres trimestres.