La indecencia

Tomás Hernández. Costadigital

    Tenía pensado el título de un artículo sobre el cuidado excesivo de la apariencia y el abandono de la vida interior. Una cosa mística que además de gustarme me ha ayudado a sobrevivir. No soy dualista como lo era Platón. No creo en el alma, tampoco en el cuerpo como entidades separadas.

    Y pensaba hablar de esas paparruchas ideológicas tan de moda, como un tal Osho, o el brasileño, que se llama novelista, un tal Coelho. Pero llego a casa a las nueve, después de un atardecer desde ‘Luciano’, con un White Label y queridos amigos, y abro Internet, en su orden: correo, Costadigital, Ideal… y ahí arranca mi indignación.

    Transcribo de Ideal: ‘Santamaría. ‘’El desahucio nos puede pasar a cualquiera’’.

    Santamaría es Soraya Sáenz de Santamaría, vicepresidenta del gobierno.

    ¿A cualquiera? ¿A usted, Soraya Sáenz de Santamaría? ¿Usted teme el desahucio de sus casas? Porque quizá tenga más de una.

    Usted, con esa frase atroz, no merece el respeto ni siquiera de quienes la votaron. No le digo de quienes no lo hicimos.

    Usted ni siquiera es cínica, porque degradaríamos con ese adjetivo a Diógenes Laercio. Usted raya la indecencia.