Una escuela de verano con tintes solidarios

Izquierda Abierta ha celebrado en la costa granadina su primer campamento dedicado al debate político y a la reflexión

Granada Hoy

Cuatro días de convivencia entre estudiantes, profesores y catedráticos de Universidad, alcaldes y concejales, flamencos activistas, ex parlamentarios, escritores, diputados y ecologistas. Todos de distintas provincias andaluzas, pero también de Madrid. Y, por supuesto, de distintas edades.

Muchos anónimos y otros muy conocidos, como Almudena Grandes, Luis García Montero, Gaspar Llamazares, Antonio Maíllo o Carlos Berzosa. "La política la hacen las personas", dice Lucía Márquez, coportavoz de Izquierda Abierta de Sevilla, por lo que el mayor activo que se llevan de la I Escuela de Verano de este joven partido integrado en IU son los momentos compartidos en Castell de Ferro.

La elección de la localidad granadina para el primer encuentro de este tipo de este partido ha sido por varias razones: La primera, para hacer visible esta población costera, aislada como toda la comarca por los problemas de comunicaciones, sin autovías, sin trenes… De hecho, ayer había una buena cola para acceder hasta este municipio, sobre todo, a la altura de Torrenueva. Otro de los factores para haber elegido Castell ha sido la tranquilidad "que invita a la reflexión, al contrario que otras ciudades masificadas", y la interculturalidad de la misma. Allí residen varias nacionalidades desde hace años, en un modelo de convivencia pacífica, "lo que nos parece un ejemplo".

Una de las circunstancias excepcionales es que el ayuntamiento, en el que gobierna el PP, les ha cedido las instalaciones municipales para celebrar sus mesas redondas. Para Eloy Martín, alcalde de Gualchos-Castell de Ferro, "no debería ser algo a destacar sino algo normal y democrático" y explica el comportamiento de sus gentes (que se caracterizan por un trato amable y cordial) en que "somos medio musulmanes, por lo que nos gusta la hospitalidad".

La ex portavoz parlamentaria Concha Caballero comentó que le estaba gustando la experiencia, en especial, el momento en el que Luis García Montero leyó el viernes por la noche un poema bajo el cielo estrellado de la plaza. Desde el jueves hasta hoy, en el que parten cada uno a su lugar de origen, ha habido momentos para múltiples mesas redondas, pero también para almorzar juntos, ir a la playa… Y, la mayor parte del tiempo, ha estado repleto de reflexiones. En corrillos allí y allá, las conversaciones eran profundas.

"Ha sido un fin de semana de trabajo y de aprendizaje", comentaba Raúl Solís, uno de los organizadores. "Queremos que IA sea cercana, que sepa escuchar". Ayer se cerró esta Escuela de Verano con mesas redondas en las que se trató "El valor del compromiso cultural", "El Presupuesto 2014 de la Junta de Andalucía: un instrumento de acción para otras políticas posibles" o "El nuevo modelo productivo andaluz-economía verde: hacia una salida ecológica a la crisis".

Un salón donde se pudieron ver varias camisetas de ’la marea verde’ escuchó también con atención debates sobre "La implicación ciudadana en la política" o "Retos de la izquierda en la Europa del siglo XXI". El último acto fue un cine-fórum en el que se vio el documental "15-M Málaga despierta". El coordinador de IULV-CA, Antonio Maíllo, fue el encargado de clausurar el encuentro.

Y, detrás de todo, un fin solidario: una veintena de participantes se ha alojado en el colegio Stella Maris, regentado por monjas dominicas, que hacen una intensa labor social en la zona. Con los 15 euros que les cuesta dormir y utilizar la cocina permitirán que sea posible traer a niños que no tienen ingresos para disfrutar de las vacaciones que creyeron impensables, en un marco increíble junto al mar.