La Junta incentivará a los establecimientos hoteleros que abran todo el año

El Consejo de Gobierno ha aprobado las Estrategias para la Gestión de la Estacionalidad Turística en Andalucía 2014-2020, un plan dotado con 15 millones de euros que entre otras actuaciones establece bonificaciones fiscales a los establecimientos hoteleros que permanezcan abiertos todo el año. Se trata de un conjunto de iniciativas que pretenden convertir a Andalucía en un destino de referencia durante todo el año, así como crear empleo estable y optimizar el uso de la infraestructura existente, según ha explicado en conferencia de prensa el consejero de Turismo y Comercio, Rafael Rodríguez. 

 

Para justificar la conveniencia de este plan, el consejero ha llamado la atención sobre el hecho de que un total de 84.386 plazas hoteleras del litoral no estaban disponibles el 1 de marzo, lo que supone el 54% de las plazas del litoral, tras lo que ha subrayado que Andalucía "no se puede permitir estar cerrada durante aproximadamente cinco meses al año". Ha remachado que no abrir en temporada baja tiene "tremendas consecuencias" para la imagen turística, pero también para la rentabilidad del negocio, el empleo, el comercio y la restauración. "Cuando un hotel cierra, cierra todo el entorno porque es un factor de arrastre", ha recalcado el responsable de Turismo, que ha resaltado que las estrategias aprobadas por el Consejo de Gobierno han sido acordadas con los agentes socioeconómicos. 

 

Entre otros objetivos, la Junta plantea reducir en cinco puntos anuales la tasa de establecimientos hoteleros que cierran en temporada baja hasta situarla entre un 20 y un 25% en 2020. Las estrategias, integradas por once programas específicos para diversificar la oferta y atraer los segmentos de demanda con menos componente estacional, se desarrollará a través de tres planes de choques bienales, ha explicado. 

 

Así, el primero de estos planes cuenta con un presupuesto de cinco millones de euros a cargo de la Junta, que permitirá movilizar una inversión de otros cinco millones por parte del sector privado, y para los otros dos bienios se prevén similares cuantías de aportación autonómica y privada. El documento incluye un diagnóstico sobre la concentración de los flujos de viajeros en determinadas épocas del año, así como sobre sus causas y los principales efectos en el sector. 

 

En cuanto a las causas, se destacan, entre otras, los factores climáticos, la excesiva dependencia del segmento de sol y playa, los componentes culturales y el gran peso delmercado nacional, de marcado carácter estacional. Respecto a los efectos, el estudio subraya la pérdida de rentabilidad y eficiencia de las infraestructuras turísticas, la inestabilidad y precariedad del mercado laboral, la sobreexplotación de los recursos naturales en determinados periodos del año, así como una pérdida de competitividad en la imagen del destino. Según los datos de este análisis, el 37,1% de los viajeros que llegaron a Andalucía el pasado año lo hicieron entre julio y septiembre, porcentaje que se eleva al 43% en las zonas de costa. "Lo que no es sostenible en el futuro es incrementar las pernoctaciones de los viajeros disminuyendo el empleo porque eso significa que se pierde calidad y la calidad es el salvoconducto para atraer turismo", ha subrayado Rodríguez. 

 

Las Estrategias para la Gestión de la Estacionalidad Turística abordan cuatro ejes principales de actuación -demanda, oferta, turismo social y competitividad- y establecen medidas paraatraer un mayor número de visitantes en temporada media-baja. Para ello, se dará prioridad a aquellos mercados en los que se pueden intensificar las políticas de difusión, promocionando vacaciones cortas entre la demanda nacional, reforzando los productos con menor estacionalidad y dirigiéndose a los segmentos de población con mayores posibilidades de viajar durante el año. 

 

Asimismo, se incentivará a las empresas hoteleras que abran sus establecimientos durante todo el año a través de apoyos promocionales específicos y se impulsará la diversificación de la oferta y la especialización en tipologías turísticas, además de realizar campañas institucionales para promover una distribución de los periodos vacacionales a lo largo de todo el año.