Cayo Lara confía en que la Huelga del 8-J sirva para transmitir una imagen diferente de la España de crisis, corrupción y paro del bipartidismo
El coordinador federal señala durante el II Encuentro de Grupos Parlamentarios de IU celebrado en Valladolid que “si finalmente hay una reforma laboral que recorta derechos y abarata el despido, habrá una huelga general y la apoyaremos, no para derrotar a ningún gobierno sino para ir contra el poder económico que ha provocado la crisis y para que el Ejecutivo sitúe su brújula hacia los trabajadores”.
El coordinador federal de Izquierda Unida, Cayo Lara, ha confirmado hoy el “total apoyo” de esta formación a la huelga de trabajadores públicos del día 8, al tiempo que confía en que esta acción de protesta de los sindicatos sirva para “dar una imagen de España diferente de la pésima que traslada este país al mundo de crisis, corrupción y paro, que es la que degrada realmente nuestra situación”, transmitida por las políticas del “bipartidismo de PSOE y PP”.
Lara se expresó de esta manera durante el II Encuentro de Grupos Parlamentarios de IU celebrado en Valladolid, una jornada anual donde esta formación pretende a través de las aportaciones de sus cargos públicos en los distintos parlamentos y los representantes de todas sus federaciones compartir y coordinar las alternativas que ofrece la izquierda a la grave crisis económica, al ajuste duro del Gobierno y las medidas que busca impulsar a nivel estatal.
El coordinador federal detalló que IU tendrá una presencia “activa” en la huelga, dado que ésta no sólo se hace en defensa del salario de los funcionarios sino para responder “al ataque en toda regla que sufre el sector público por parte del capitalismo salvaje y abusivo. Su ambición es cargarse las conquistas sociales ganadas históricamente por los trabajadores”.
Cayo Lara avanzó que “si finalmente se produce una reforma laboral que recorta derechos laborales y abarata el despido, habrá una huelga general y la apoyaremos. Las condiciones se han agudizado en detrimento de las capas populares”. Aclaró que, aunque Rodríguez Zapatero se tiene bien merecida esta huelga, IU la apoyará “no para derrotar a ningún gobierno sino para ir contra el poder económico que ha provocado la crisis, en defensa de los trabajadores y para exigir al Gobierno que sitúe su brújula hacia éstos y no con los poderosos”.
El máximo dirigente de IU reconoció que en el caso de que los sindicatos convoquen finalmente esa huelga general “habrá que hacer un importante trabajo de pedagogía” para explicarla y para que el Gobierno “tome nota de ella”, ya que precisó que Izquierda Unida no está en la “idea de un adelanto de elecciones, sino en que haya un giro en las políticas neoliberales del Ejecutivo”.
Lara se mostró satisfecho por el trabajo que llevan a cabo las distintas federaciones de IU representadas en la cita celebrada hoy y trasladó su confianza para que “en los siguientes encuentros podamos triplicar nuestra representación, pero no por lo mal que lo hace el Gobierno sino por el acierto de nuestros representantes en las instituciones”.
En su intervención, detalló que “nunca en la historia de la democracia un gobierno del PSOE ha tenido un nivel tan bajo de aceptación”, al tiempo que señaló que el Ejecutivo de Rodríguez Zapatero “está haciendo el trabajo sucio a los poderes económicos” con el ‘decretazo’ ya aprobado y la reforma laboral que puede plantear de forma unilateral la próxima semana, para que “como pretenden las empresas importantes, se les permita despedir a trabajadores de más edad para contratar a jóvenes ‘mileuristas’”.
Cayo Lara señaló su confianza “para que esta manera de actuar no acabe arrastrando a la izquierda. Nosotros no somos lo mismo que el PSOE y el PP. Somos la alternativa a las políticas neoliberales en las que ellos coinciden”.
El coordinador federal tachó de “patética” la imagen que da el presidente del Gobierno instando a los ciudadanos a sufrir ahora “para ser más felices en los próximos 20 años. El fondo del problema es la imagen que se da de la democracia a los pies de los mercados”.
“Ahora vemos –advirtió- las consecuencias de las privatizaciones y de las políticas neoliberales. El adelgazamiento sistemático del Estado ha hecho que éste sea más débil que los mercados. Se han invertido los términos y la pregunta ahora es ¿quién debe controlar a quién?”.
Para Lara, “el ajuste duro que se va a aplicar va a afectar también a los ayuntamientos y a las comunidades autónomas, mientras aún no hay ni una sola medida del Gobierno dirigida a los ricos y poderosos. Si es verdad que no se puede hacer otra cosa, que salga el presidente del Gobierno y lo cuente. Nosotros no creemos que sea así”.
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