Las autoridades marroquíes expulsan a Willy Meyer a su llegada a El Aaiún y le impiden visitar los campamentos saharauis

El responsable del Área de Política Internacional de IU valorará este grave incidente a su llegada alrededor de las 17,55 h. al europuerto de Gran Canaria.
 
El responsable de Política Internacional de Izquierda Unida Federal y eurodiputado, Willy Meyer, se ha visto obligado a regresar a Canarias en el mismo avión que le trasladó hasta El Aaiún al impedirle las autoridades marroquíes desembarcar del aparato y acceder a las dependencias del aeropuerto. Meyer viajó desde Gran Canaria a El Aaiún en el vuelo NT6100 de la empresa Binter Canarias, que aterrizó en suelo del Sahara Occidental poco antes de las 16,00 h.
 
El dirigente de IU hara una valoración de este grave incidente una vez aterrice el avión en el que se despalza en este momento, alrededor de las 17,55h. hora peninsular. Meyer intentó llegar a los campamentos saharauis para comprobar la situación en la que se encuentran sus habitantes y recabar información de primera mano sobre las últimas acciones y la violación de los más elementales principios de legalidad por parte de las autoridades marroquíes.
 
En conversación telefónica con el Gabinete de Prensa de IU, Meyer ha asegurado que “se están viviendo momentos de cierta tensión ya que en el exterior del aparato se encuentra cerca de medio centenar de colonos marroquíes con banderas y enseñas lanzando gritos y proclamas nacionalistas y con actitud nada amistosa”.
 
Meyer, tras iniciarse los problemas para poder acceder a las instalaciones aeroportuarias de El Aaiún, ha comunicado su condición de europarlamentario al comandante del aparato y le ha reclamado que no autorice la entrada de agentes de la Policía marroquí en el mismo para salvaguardar su seguridad.
 
Meyer había sido despedido del aeropuerto de Gran Canaria alrededor de las 14,30 h., entre otros, por la activista saharaui Aminetu Haidar y representantes de asociaciones de derechos humanos en defensa del pueblo saharaui.
 
Meyer, tras los lamentables sucesos ocurridos los últimos días en los diferentes campamentos saharauis, que culminaron con el asesinato de un menor de 14 años, considera que “con esta visita pretendemos hacer un llamamiento al Gobierno marroquí para que entienda que el pueblo saharaui no está ni estará nunca solo. Estamos vigilantes ante cada uno de los atentados contra los derechos humanos que se están cometiendo y los denunciaremos con firmeza ante la Unión Europea”.
 
El eurodiputado de IU recuerda que “con la salida del enviado especial de las Naciones Unidas, Christopher Ross, los saharauis acampados pacíficamente se quedaron a merced de las mismas autoridades marroquíes que no están respetando las mínimas normas de convivencia y que pretenden que no haya testigos independientes que den cuenta de sus actuaciones”.
 
Willy Meyer valora que el rechazo a la entrada de varias delegaciones de medios de comunicación europeos “pone de manifiesto la opacidad con que el régimen marroquí trata el tema saharaui. Al tiempo, desgraciadamente, evidencia que el Gobierno de este país busca incrementar la represión policial y militar que sufren los saharauis acampados pacíficamente”. 
 
Este viaje del eurodiputado de Izquierda Unida se produce tras la advertencia hecha por el Intergrupo del Parlamento Europeo de Solidaridad con el Pueblo Saharaui y la denuncia de Meyer ante el Consejo y la Comisión Europea por el asedio al que las Fuerzas Armadas, la Policía y las Fuerzas Auxiliares del Reino de Marruecos están sometiendo a los campamentos pacíficos saharauis, negando la entrada de alimentos y medicinas.
 
El responsable de Política Internacional de IU espera que con la información que recabe en este viaje pueda aportar más argumentos para que la Unión Europea se pronuncie claramente ante esta nueva violación de los derechos humanos. El objetivo  es que se acabe congelando el Acuerdo de Asociación con la UE por el continuo incumplimiento marroquí del artículo 2.
 
Del mismo modo, Meyer reitera su exigencia en nombre de IU al Gobierno español para que “haga todo lo posible para garantizar la seguridad del pueblo saharaui en el cumplimiento de la responsabilidad española con el proceso de autodeterminación de su antigua colonia”.