Venezuela da una respuesta humanitaria y socialista a los daños generados por las fuertes lluvias en el país

El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, ha ordenado que se utilicen los hoteles del turístico municipio de Higuerote, en el estado de Miranda (norte), para alojar a los 40.000 damnificados en esta localidad por el temporal de lluvias que azota al país.

    "Hay que intervenir parte de esas instalaciones para que ustedes se muden, (...) No es justo que ahí al lado esté un conjunto de edificios de turismo abandonados y ustedes estén aquí en medio del aguazón, eso viola el principio de igualdad que está establecido en la Constitución", dijo Chávez en un discurso televisado.

    En este sentido, Chávez instó al comandante general de la Guardia Nacional Bolivariana, Luis Mota Domínguez, a iniciar el traslado de los damnificados. "Que se entienda bien, Mota, quiero que ocupemos bajo préstamo los hoteles de la zona para montar allí los comandos cívico-militares. Ustedes duerman tranquilos", indicó.

    El mandatario explicó que la medida se enmarca en la declaratoria del estado de emergencia, que permite al Gobierno adoptar iniciativas excepcionales con el fin de agilizar las tareas de socorro a la población. "La emergencia no es solo para decir que estamos en emergencia, es para tomar medidas", aclaró.

   Por otro lado, el Gobierno de Venezuela va a construir 22.000 viviendas en los próximos 18 meses a través de un proyecto de desarrollo urbano para alojar a las familias damnificadas por las lluvias, según ha anunciado a Telesur el vicepresidente de Venezuela, Elías Jaua.

    Jaua destacó que los equipos de cada uno de los ministerios que conforman el Gobierno se encuentran en el proceso de construcción de los proyectos de viviendas junto con las comunidades.

    El vicepresidente resaltó la labor conjunta del pueblo que ha permitido al Gobierno trabajar de manera coordinada "y atender rápidamente" a las miles de familias afectadas tras las lluvias que han sacudido al país.

    Según el Gobierno se han destinado más de 1.000 millones de dólares (unos 751,7 millones de euros) para la construcción de los espacios donde vivirán las familias damnificadas. Venezuela pretende acelerar el proceso de construcción de estas viviendas porque es una manera de "saldar la deuda" que tiene Venezuela con su pueblo, aseguró Jaua.

    Además, remarcó el buen trabajo que han llevado a cabo la administración en relación a los daños que han ocasionado las lluvias. Sin embargo, el vicepresidente denunció las actuaciones de la oposición tras desacreditar los logros del Gobierno por querer ocupar de manera temporal algunos espacios sin uso como los hoteles.

    "Venezuela no puede escaparse de la polarización y la confrontación de clases. Es lo que ha vivido Venezuela con un Gobierno tratando de construir un país donde quepamos todos mientras las viejas clases oligárquicas siguen defendiendo sus propios intereses", agregó Jaua.