El acuerdo plenario sobre el Mercado prolonga la incertidumbre y aleja la posibilidad de resolver al problema

IU lamenta que no se aprobara en Pleno la resolución del contrato con la empresa que gestiona el aparcamiento. Si en el Pleno de septiembre, sólo un grupo se opuso a anular el contrato, en este han sido dos los grupos que han tomado ese camino, con un cambio de postura sorprendente del grupo socialista. Respecto al grupo que lleva dos años mintiendo y enredando en este tema, IU no espera nada nuevo. Sabemos que su único interés es bloquear la situación y que el problema dure, al menos, tanto como los hoyos de las playas.

La ciudadanía tiene que saber que hasta que no se acuerde la nulidad del contrato, nada se puede hacer en el aparcamiento y, por tanto, ninguna obra se puede acometer en el mercado. La actitud de los grupos que pidieron una negociación imposible sólo puede conducir a prolongar en el tiempo un problema que ya tenía que estar resuelto. No es razonable volver a defender en Pleno que la solución es una negociación entre ayuntamiento y empresa ya que esa negociación se ha intentado en varias ocasiones sin éxito. Y menos serio aún es que un grupo municipal diga que va a mediar entre ayuntamiento y empresa. Se supone que los grupos municipales somos ayuntamiento y tenemos que defender los intereses del municipio, no mediar entre ayuntamiento y empresa.

Los grupos que hablan de una negociación imposible deberían explicar sobre qué bases se sustentaría esa negociación, qué ofrece la empresa y, sobre todo, qué se pide al ayuntamiento, es decir, al contribuyente. Hasta ahora, lo único que sabemos es que la empresa ya pidió hace un año romper el contrato, pero siempre que se le indemnizara convenientemente. Cada vez que la empresa ha hablado de retomar las obras ha sido a cambio de unas cantidades desorbitadas que una administración municipal seria no puede aceptar. La alcaldesa no maneja su dinero, sino el de todos los ciudadanos, así que IU estará en contra de una solución que suponga malgastar el dinero público.

IU insiste en que el contrato hay que anularlo, no hay otra vía, pero demostrando que la empresa ha incumplido al no hacer las obras pactadas. Y esto sólo se puede hacer con permiso del Consejo Consultivo. Si se cierra este camino, el ayuntamiento lleva las de perder. La empresa quiere dejar el contrato, ya que se siente engañada por el ex alcalde, al que acusa de haberla metido en un berenjenal, pero pide para anularlo nada más y nada menos que 4.275.978,25€ en concepto de obra realizada, canon aportado, gastos diversos e indemnización. Somos todos los ciudadanos quienes tendríamos que pagar ese dinero, así que ya está bien de jugar alegremente con el dinero del contribuyente. No tenemos claro en qué lado están algunos en este conflicto entre empresa y ayuntamiento, pero el lugar de IU está de forma inequívoca a favor del ayuntamiento, a favor del contribuyente.

IU critica de nuevo la lentitud y los errores administrativos del gobierno municipal en este tema, pero la obligación de unos concejales que se preocupan por su pueblo es la de colaborar a que esos defectos se subsanen en vez de ponerse del lado de la empresa, algo que se está haciendo de forma consciente o inconsciente.

IU espera que la cordura se imponga en el grupo socialista y el aliado que encontró Benavides en el Pleno reconsidere su actitud, ya que de persistir en la negativa a anular el contrato, se está bloqueando la situación, con lo que se impide dar una solución al mercado. Malo para los puestos del mercado, malo para la ciudad y malo para los contribuyentes