Autocrítica

Juani Boto. Responsable de Organización de IU Almuñécar

Por fin ha pasado el periodo electoral. Ha sido una campaña intensa en la que muchísima gente se ha implicado en Izquierda Unida; más que nunca. Decenas de personas han apoyado públicamente nuestro programa, nuestra candidatura. Muchas personas haciendo campaña para que el proyecto de IU llegue a la gente.

Muchos años contra la corrupción. Muchos años de trabajo constante contra las privatizaciones, en defensa de lo público como garantía de eficacia, ahorro y salarios dignos. Contra las leyes injustas.

IU ha perdido votos, sí, pero la realidad es que la base social de esta organización se ha ampliado de manera considerable. Somos muchísimos más que hace cuatro años, cuando sacamos dos concejales. Digo esto porque no se puede valorar el crecimiento de una organización en función de los votos, y nosotr@s quizás nos hemos dejado llevar por la “euforia” de ese crecimiento “virtual” de estos años.

Hay personas que nos piden autocrítica por los resultados electorales. A revueltas con aquello del “pacto con el PP y el apoyo a la derecha”, hay gente que parece que va buscando una excusa para escenificar que no nos ha votado, para no participar en una organización que siempre ha estado del lado de lo público y de la clase trabajadora o, simplemente, para meter cizaña y crear tensiones.

Quiero, mi deseo es que fuera la última vez, volver a repetir lo que tantas veces hemos explicado.

Primero: El pacto de IU fue con su programa. El programa de IU no nació debajo de un árbol, fue un proyecto discutido y aprobado por tod@s los que componían esta organización. En él venía recogido que IU apoyaría cualquier opción que implicara quitar a la mafia de en medio y abrir las puertas del ayuntamiento.

Segundo: tras los resultados electorales de 2011 y ante las expectativas de cambio, la asamblea de IU ratificó ese acuerdo por mayoría absoluta, con una abstención.

Tercero: sólo había dos opciones; dejar gobernar a la mafia que ha esquilmado las arcas públicas, que ha despedido a trabajadores municipales, que ha privatizado servicios públicos, que ha hundido negocios, que ha extorsionado y amenazado, que mandó contrapiquetes para parar una lucha legítima como fue la huelga de los trabajadores de la recogida de basura, que ha enterrado millones de euros en Peña Escrita para irse de romería, que ha puesto a trabajadores municipales a trabajar en los planos de su palacio de Marruecos, a quien cobraba como el presidente del gobierno y no tiene nada a su nombre, al que ha construido instalaciones ruinosas que nos están costando y nos costarán mientras duren, obras que han sido cobradas y certificadas y no han sido terminadas… Corrupción. Hablo de corrupción.

Estaba esa opción o que gobernara el PP. No había mas opciones.

El argumento de que IU ha apoyado a la derecha en estos cuatro años no puede ser más falaz. Lo explico también:

Los que han apoyado al PP en estos cuatro años han sido PSOE, PA y CA que, conjuntamente con ellos, han levantado la mano en los plenos para privatizar servicios públicos como el servicio de limpieza de los colegios o el servicio de limpieza viaria y recogida de basuras, la primera a una empresa de Florentino Pérez y esta última, a una empresa de la Koplovitz, y tres días antes de las elecciones (qué casualidad). Esos mismos que levantaron sus manitas junto al PP para aprobar exenciones fiscales de hasta un 95% para las empresas que facturan más de un millón de euros mientras que las PYMES y las familias no llegan a final de mes. No paguéis el IBI de vuestra vivienda y veréis.

IU es una organización que está en constante autocrítica. IU, haga lo que haga siempre lleva palos. El que es un mega revolucionario dice que somos unos reformistas, y el que es un reformista dice que somos unos radicales. Frases hechas que al fin y al cabo no dicen nada, pero que siempre implican un pero para no implicarse o no votarnos.

Me vais a perdonar pero en esta ocasión no voy a hacer autocrítica. No voy a hacer autocrítica por algo que volvería a hacer una y mil veces, como dice mi compañera Fina. 

No voy a hacer autocrítica a mi/una organización en la que hay compañeras como Luci; siempre en defensa de la vivienda y en lucha contra los desahucios, en defensa de los animales. Compañer@s como Fermín, Antonio Aragón y Antonia López; siempre en la lucha sindical contra los abusos y ataques de la patronal. Mi amigo Morgan, una de las personas más trabajadoras e inteligentes que conozco (esto lo digo para que me invite a un cubata), que se deja los sesos estudiando documentos y pegando carteles en vez de estar en la Pisá de la Vaca tomando una copa. A mi querido Leyva; una persona con muchos conocimientos que siempre está disponible para todo. No voy a hacer autocrítica de esta organización que esta llena de gente honrada que se ha dejado la piel contra la corrupción y que adoptó un acuerdo con valentía.

Que hagan autocrítica los que llevan robándonos treinta años. Que hagan autocrítica aquellos que, bajo el título de izquierda, aprueban privatizaciones y quieren campos de golf, puertos deportivos y llenar de cemento nuestras costas. Que hagan autocrítica aquellos que condicionan acuerdos a intereses personales. Que también hagan autocrítica aquellos que les votan. Que hagan autocrítica aquellos que no hacen nada por cambiar esta sociedad, mientras los que he mencionado antes y otr@s muchos, ponen su tiempo a disposición para construir un municipio, un país, habitable; de buen vivir, como dice Fermín.

Disculpad pero no voy a autocriticarme. Que lo hagan otros si quieren, yo estoy un poco cansado ya.

Seguramente hemos errado en algunas cosas, erraremos, pero las decisiones las tomamos entre todas y todos, para que, como dice mi compi Jesús, nadie tome las decisiones por nosotr@s. Díganme si los demás hacen lo mismo.